Antes
de que Como una flor acabara, fui a esperarla a su camerino. Estaba
ansiosa por verla, besarla y hacerle de todo ahí mismo. ¡Como había
estado mi niña!
No
tardó en aparecer por la puerta y abalanzarse sobre mi. Yo la besé
por toda la cara y ella no paraba de reír. Quien nos viera...
Parecíamos dos niñas.
-Para,
para.- Me decía mientras intentaba separarse de mi.- No puedo
respirar.
-¡Vaya
espectáculo gorda!.- En ese momento pasó por delante mía. Con
cariño, le dí un palo en el culo. Sé que no le gusta nada, así
que con una sonrisa esperé a ver su reacción.
-¡Vanesa!
¡Que llevo cuero y pica joder!.- Me acerqué lentamente para dejar
un beso en su frente.
-No
termino de acostumbrarme a ti.- Digo tras el beso. Ella hizo un gesto
de los suyos. Reafirmando lo dicho. Cada vez me sorprendía cada día
y eso era una verdad como un templo. Yo lo único que podía hacer
era rendirme ante ella.
Recuerdo
que en ese momento Malú se apoyó en la mesa para quitarse el
maquillaje. Yo como siempre fui esclava de mis impulso y me
coloqué detrás de ella. Comencé acariciar
suavemente su espalda, desde la nuca hasta el filo de su pantalón.
-Cariño
así no puedo...- Me decía susurrando.
-Esque
no puedo estar más tiempo sin besarte.- Sonrió y siguió a lo suyo.
De nuevo volví a su espalda. Vi por el espejo como cerró los ojos y
paró de quitarse el maquillaje. Empecé a besarle el cuello, metí
mis manos por debajo de su camiseta y sin quererlo ella empezó a
moverse. Si, le estaba haciendo cosquillas, es muy sensible respecto
a eso, cuando digo muy sensible me refiero a eso. No puedes tocar ni
un centímetro de su cuerpo sin que se ria. Os doy permiso para
pensar mal...
-Vane,
no, que me haces cosquillas.- Entre su risa que se mezclaban con sus
palabras y encima que me hablaba rápido no me enteré ni de la mitad
de las cosas que decía. Solo le entendí el "Vane, no".
-¡Vane,
si!.- Con un sutil movimiento la giré para verle la cara.
¡Oh
dios mio! Sin maquillaje es más preciosa si cabe.
-¿Qué
pasa?.- Dijo ante mi embobamiento.
-Cada
día estas más guapa...- Musité a un centímetro de su boca. Y no
hay una mejor mezcla que te dedique una de sus mejores sonrisas.
-¿Vienes
conmigo a casa?.- Resoplé. Lo hice porque ella sabía la respuesta.
-Sabes
que no puedo...- Acariciaba su moflete con delicadeza pero de nada
sirvió.
-Como
poder si puedes... Lo que pasa que te vas con ella.- Se separó de mi
lado con los brazos cruzados. Cuando dice "ella" se refiere
a Inma, es una amiga, actriz, ha venido a pasar unos días a Madrid.
Mañana se va y me encantaría verla. Los días que ella ha estado
aquí me ha sido imposible.
-Cariño,
solo me voy a tomar algo por ahí y vuelvo a casa antes de lo que tú
te piensas...- Me acerqué lentamente a ella, seguía con la misma
posición de antes.- Mañana se va y me gustaría pasar unas horas
con ella.- Le aclaré pero no sirvió de nada.
-Haz
lo que quieras.- Que peligro tiene esta frase ¿verdad? Yo me quedé
callada porque era lo mejor que podía hacer en estos momentos.
El
silencio se apodero del camerino. Ella siguió a lo suyo. Le observé
como se desvestía y volvía a vestir.
-¿No
te ibas?.
-Así
no...- Me acerqué de nuevo a ella y le intenté besar pero antes de
que mis labios aterrizaran en los suyos se apartó, bueno, más bien
me hizo la cobra. Eso me encendió de más, y más dando la
casualidad de que Inma abrió la puerta del camerino justo en ese
preciso momento.
-¡Ups!...
¿Interrumpo algo?.- Vi las intenciones de Malú, y antes de que
pudiera soltar alguna bordería de las suyas me adelanté. -No.- Dije
con la voz tranquila.
Después
de fusilar a Malú con la mirada y coger mi bolso le dediqué un "Ahí
te quedas". Os juro que yo la quiero muchísimo, pero cuando se
pone así es infernal.
-¿Ha
pasado algo?- Inma atrae mi atención mientras salimos de la plaza de
toros.
-No
te preocupes, no ha pasado nada.- Saco una sonrisa a relucir bastante
convincente.
Salimos
por la puerta de atrás y caminamos un par de calles hasta llegar a
mi coche. Ella por el camino intenta convencerme de dejarlo para otro
día, pero yo me niego, no voy a cambiar mis planes por una
energúmena.
-Vamos
a tomar algo ¿vale?.
Entramos
en mi coche y pongo rumbo hacia las afueras de Madrid.
Inma
me observa mientras conduzco. Intento cambiar mi humor, Inma no se
merece que la trate de esta manera tan seca. Pongo la radio e intento
sacarle tema.
-He
estado pensado sobre lo que me pediste la otra vez.- Digo con una
sonrisa en los labios. A provecho un semáforo para mirarla.
-¿Ah
si? ¿Y qué?.- Entrelaza sus manos y no me quita ojo.
-Que
si. Quédate la canción para el musical.
Ella
sonríe a más no poder y me da un beso en la mejilla.
-¡Va
a quedar genial!. ¿Vendrás no?.
-Eso
está claro.
Seguimos
nuestro camino. No había nada de trafico, Madrid estaba desierta y
el local estaba más de lo mismo.
A
penas 3 mesas ocupadas de 10 que habían. Ella y yo agradecimos el
poco ambiente que había.
Pasaron
un par de horas, las disfruté como una enana. Inma había tenido la
capacidad para que olvidará por unas horas la discusión que había
tenido con Malú. Decidimos irnos. Bueno más bien el dueño nos
echó. Hacía años que no cerraba un bar.
Vamos
caminando por las calles hasta llegar a mi coche. Inma iba dando
tumbos y no paraba de reír. Yo adelanté mis pasos y pasé su brazo
por mi cuello.
-No
tenías que haber tomado la última.- Reímos las dos a la vez
mientras ella asiente.
-¿Te
puedo hacer una pregunta?.- Dice mientras me frena. Apoya su espalda
contra la pared y aclara su garganta.- Si tu no estuvieras con Malú
crees que tu y yo...- Frunzo el ceño y achino mis ojos. ¿Me esta
preguntando lo que creo que me esta preguntando?- ¡Bah! Déjalo, no
son horas y yo no estoy en mi sano juicio para hablar.- Me hago la
loca y vuelvo a cogerla como antes.
Esta
vez mientras caminamos la voy mirando. Observo sus rasgos, me fijo en
sus ojos, su piel, su pelo. Sonrío al ver lo pequeña que es. Con la
sonrisa puesta, mientras la ayudo a andar, llevo mi vista al frente y
¡Zasca! Mis ojos se encuentran con un cartel de gira de Malú del
concierto de hoy. La realidad me acaba de pegar un guantazo que
duele. Por fin llegamos al coche. Al apenas arrancar Inma se queda
dormida. Intento mantener mi mente despejada con música. Pongo el CD
de Adele. En cuestión de 3 canción llego a casa de Inma. La dejo
viva y salva y me marcho para ir a casa de Malú con suerte la pillo
durmiendo. Son cerca de las 5 de la mañana, al llegar a su casa veo
que tiene las persianas subidas y las luces encendidas. Exacto, esta
despierta.
Salgo
del coche y me cuesta caminar. No quiero entrar, no me apetece nada
discutir.
Llego
a la puerta y dudo, meto la llave, la saco, lo hago un par de veces,
y me sorprende cuando la puerta se abre del tirón.
-¿Qué?.-
Dice con los ojos llenos de furia.- ¿No piensas pasar? ¿O vas a
seguir comprobando que la cerradura va bien?.
-No
empieces por favor.- Entro en casa apartándola de la puerta.
-¿Te
lo has pasado bien?.-Murmura entre dientes.
No
contesto, pillo al vuelo el doble sentido de esa pregunta. Me quito
la chaqueta y la dejo encima de la silla. Se acerca a mi y de un
movimiento rápido me gira.
-Mírame
cuando te hablo.
Me
acerco a ella despacio, segura de mi misma. Mi sangre recorre mi
cuerpo a mil por hora y siento que el corazón se me va a salir del
pecho. Siento que algo se ha roto. Y por dentro me hago trizas. ¿Como
es posible que este perdiendo a la mujer que en apenas un año y
medio me ha dado vida?.
Me
detengo a unos centímetros de ella. La escucho respirar desde aquí.
Lo hace profundo. Tiene los puños cerrados y sus brazos están en
tensión. Su pecho sube y baja. Y desde aquí puedo leer en sus ojos
lo que tiene miedo a decirme.
Suavizo
mi mirada. Me trago mi mal humor y con delicadeza intento besar su
frente.
-¡No!.-
Se aparta de mi.-Vane, me has dejado tirada para irte con otra.
Me
da un pequeño empujón que apenas me mueve del sitio y sigue
reprochándome cosas.
-Sabías
que este día era importante para mi y me has dejado sola.
-¿Y
tú sabes que es lo importante para mi?.- Respiro agitada.
Hacemos
una pausa, su rostro cambia, esta pensativa y duda en hablar.
-¡No
tienes ni idea de lo que quiero yo!.- Alzo un poco la voz.- Me he
desvivido por ti. He cambiado muchas cosas en mi vida por ti. He
cambiado mi forma de querer por ti. Y tu aún así ¡me exiges más!.
No estas siendo justa conmigo.
-Yo
no te obligo a estar aquí.
-No
te has preocupado nunca por mi.- Digo sin hacer caso de lo que me
dice.- Vivo en clandestinidad contigo y con eso me tengo que
conformar. Reniegas de mi delate de todo el mundo, y aún así sigo
estando aquí. ¿Qué más quieres?.
Las
dos bajamos la mirada y nos damos la espalda. Ninguna dice nada.
Respiro
hondo, necesito que entienda todo lo que he hecho por ella. Me giro
despacio y la veo mirar por la ventana, sigue impasible, de brazos
cruzados, no sé que más quiere de mi.
Camino
nerviosa por el salón. ¿Es qué no piensa decir nada?
Pataleo
fuerte. Se gira al escucharme, y sin aguantar estas ganas de gritar y
romper todo lo que tenga a mi paso, le digo:
-¿Es
qué te da igual que me sienta así?.
Doy
un golpe en la mesa, su silencio me revuelve. Paso mis manos por mi
cara.
-No
quiero hablar de eso ahora, ¿vale?.
-Vale...-
La miro furiosa- Pero quizás cuando tu quieras hablar yo ya no este.
-¿Lo
estas dejando?.
-¿Es
que alguna vez hemos estado juntas?.- Malú me mira, sus ojos me
traspasan la piel. Sin achicarme, me acerco a mi guitarra y aclaro.-
Fuera de esta casa, claro.- Enfundo mi guitarra, y sin más salgo por
la puerta, la dejo con la palabra en la boca tras el portazo que
pegué. Los cristales temblaron, y su voz igual. La escuché
acordarse de todos los miembros de mi familia.
Noto
como la puerta se vuelve abrir. Malú sale a la calle con mi
chaqueta, y tras un “No quiero volverte a ver” bien alto, me tira
mi chaqueta a las manos.
Yo
no dije nada, me di la vuelta y al llegar a mi coche, saqué el
móvil. No sabía a quien llamar. Eran cerca de las 6 de la mañana.
Sin
pensarlo, la llamo a ella.
-Inma,
¿podemos vernos ahora?.
“Yo
me quede con su olor,
ella
me arrancó la piel,
me
dijo justo al final.
“No
quiero volverte a ver”.
Como
veis, es un capitulo que no altera nada a la historia, solo quería
seguir el primer cap porque el 19 de agosto la novela cumplió 1 año y en este año
la novela ha crecido a pasos agigantados y todavía a día de hoy me
da vértigo ver las visitas que tiene el blog, las criticas que
tiene, la gente que somos en twitter, las visitas que tiene también
por wattpad... Esta es mi mejor forma de agradeceros el estar ahí a
pesar de este parón que ha sufrido la novela que espero arreglar muy pronto. Espero que entendáis
y comprendáis, la cabeza no la tengo tan despejada como antes y
pocas cosas salen a vuestra altura. Quizás no es un capi perfecto
para celebrar un año, pero para mi seguir el primer flashback del
primer cap significa mucho, jamas pensé que iba a llegar a esta altura. Espero que la novela haga otro año y
poder hacer algo mejor!
MUCHAS, MUCHA, MUCHAS GRACIAS!!!!